Windows, desde siempre, ha sido un sistema operativo de pago. Para usarlo es necesario pagar la licencia a Microsoft. Esta podemos comprarla directamente en una tienda, en la Microsoft Store o a través del fabricante de nuestro ordenador. Por ello, si alguna vez hemos comprado un ordenador (ya sea portátil o de sobremesa) con Windows instalado, habremos pagado, aunque sea indirectamente, por este sistema. Sin embargo, los tiempos cambian, y hoy en día es posible conseguir una clave de Windows 10 y 11 legal sin pasar por caja, es decir, gratis. Os vamos a explicar cómo.
Como seguramente ya sabremos, Windows es el sistema operativo más popular del mundo, al igual que también es el más pirateado. Principalmente, esto ocurre porque los s piensan que el sistema operativo de Microsoft es muy caro. Como esto es algo que no tiene por qué ser así, podremos ve cómo podemos usar Windows gratis sin comprar una clave o bien obteniendo un clave por un precio mucho más económico que el que seguramente podamos imaginar.
Por qué usar Windows original
La gente, por lo general, es reacia a pagar. Aunque sea por un producto que utiliza varias horas a diario. Esta es la razón por la que la piratería sigue siendo un problema para la música, las películas, los juegos e incluso el software. Si puedo conseguirlo gratis, ¿por qué voy a pagar?
Es cierto que podemos encontrar muchas claves ilegales en la red, además de activadores, que nos permiten usar este sistema operativo sin pagar. Sin embargo, recurrir a este tipo de programas implica poner en peligro nuestro ordenador.
En el caso de las claves que podemos encontrar por ahí, estas en cualquier momento pueden marcarse como «pirata» y quedar bloqueadas, dejando nuestro ordenador sin activar, y limitando funciones de este. Esto, en un principio, no supone ningún problema para la seguridad, pero nuestra Cuenta Microsoft podría quedar ya marcada por la compañía, y dar lugar a posibles baneos o sanciones legales. Nunca ha pasado, pero es una posibilidad real si nos paramos a leer los términos que aceptamos al instalar el sistema.
Si por el contrario optamos por el uso de programas, entonces sí estamos poniendo en peligro el ordenador. Estos programas son de código cerrado, y están creados por piratas informáticos. Aunque cumplen con su cometido, no sabemos qué más cambios hacen en el ordenador. Incluso hay muchos «falsos activadores» que directamente son malware camuflado. Una prueba de ello es que todos estos programas nos obligan a desactivar el antivirus. ¿En serio merece la pena poner en peligro toda la seguridad del PC?
Tal y como os podréis imaginar esto es algo que podemos probar si disponemos de un equipo realmente antiguo que no utilicemos pero que disponía de una licencia legal de alguna versión antigua de Windows. No tendremos más que extraer la correspondiente numeración de serie introducirla en el nuevo PC con Windows que aún no tenemos en registrado.
Además de lo comentado, hay un método alternativo con el cual puedes recuperar la clave de un equipo con Windows 7 o con Windows 8/8.1 para utilizarla en otro ordenador. Para ello, simplemente debemos seguir los siguientes pasos:
- Descargamos una ISO de Windows. La montamos en Windows 7 (o en 8.1), y dentro de la carpeta «sources» encontraremos un programa llamado «gatherosstate.exe».
- Copiamos «gatherosstate.exe» al escritorio de Windows 7 (u 8.1), y lo ejecutamos.
- En unos segundos veremos un archivo llamado «GenuineTicket.xml».
- Copiamos este «GenuineTicket.xml» a una memoria USB.
- Formateamos el ordenador, e instalamos Windows omitiendo la licencia o usando una clave genérica.
- Copiamos el archivo «GenuineTicket.xml» al directorio C:/ProgramData/Microsoft/Windows/ClipSVC/GenuineTicket.
- Reiniciamos el ordenador un par de veces usando la opción «Reiniciar» (no apagar y encender).
Listo. Ahora podremos ver cómo nuestro Windows se ha activado correctamente usando la clave del Windows 7 o del Windows 8.1 original gratis, sin pagar. Aunque en un principio pueda parecer un proceso un tanto complejo, en realidad es bastante sencillo. Lo único que tenemos que hacer es seguir los pasos que os hemos expuesto en estas líneas para así poder activar Windows con la clave de una versión antigua sin problema alguno.
Por otro lado, si ya tenemos una clave de Windows en un ordenador, podemos llevarla a otro ordenador totalmente gratis (siempre que no sea de tipo OEM) de una forma distinta. Así, podremos instalar el sistema operativo de Microsoft en caso de que, por ejemplo, hayamos comprado un PC nuevo. Para ello, tan solo debemos seguir algunos sencillos pasos:
Lo primero, es desactivar la licencia en nuestro equipo anterior. Este paso es opcional, sobre todo si el otro PC se ha roto o ya no lo tenemos, pero recomendable siempre que lo tengamos a mano, ya que nos evitará problemas a la hora de activarla. Si tenemos el PC a mano, podemos deshabilitar la licencia de él abriendo una ventana de CMD y ejecutando el siguiente comando: «slmgr.vbs /upk». Acto seguido, borraremos la clave del registro de Windows con este otro comando: «slmgr.vbs /ky». Y listo.
Ahora, en el ordenador nuevo, con Windows 10 o Windows 11, tan solo debemos ir al de Configuración del sistema, y activar el sistema con nuestra licencia de Windows para poder usarlo sin restricciones.
Usar las claves genéricas de Microsoft
Cada clave de Windows debería ser privada. Si la compartimos en Internet, la gente empezará a usarla de forma masiva para activar sus ordenadores, Microsoft la detectará como «pirata» y la bloqueará. Y entonces habremos perdido el dinero. Sin embargo, no todas las claves de Windows que podemos encontrar por la red son piratas, sino que también hay algunas claves originales útiles para instalar el sistema operativo. Estas son las que conocemos como «claves genéricas».
Las claves genéricas son un tipo de clave de Windows, facilitadas por la propia Microsoft, para que los s puedan descargar, instalar y probar el sistema operativo. Estas claves genéricas para instalar y activar Windows 10 son:
- Windows 10 Home: TX9XD-98N7V-6WMQ6-BX7FG-H8Q99
- Windows 10 Pro: VK7JG-NPHTM-C97JM-9MPGT-3V66T
- Windows 10 Home Single Language: 7HNRX-D7KGG-3K4RQ-4WPJ4-YTDFH
- Windows 10 Enterprise: NPPR9-FWDCX-D2C8J-H872K-2YT43
En el caso de que lo que estemos haciendo es instalar y activar Windows 11, también vamos a poder usar una serie de claves genéricas para este sistema operativo. Estas son:
- Windows 11 Home: YTMG3-N6DKC-DKB77-7M9GH-8HVX7
- Windows 11 Pro: VK7JG-NPHTM-C97JM-9MPGT-3V66T
- Windows 11 Home Single Language: BT79Q-G7N6G-PGBYW-4YWX6-6F4BT
- Windows 11 Education: YNMGQ-8RYV3-4PGQ3-C8XTP-7CFBY
- Windows 11 Enterprise: XGVPP-NMH47-7TTHJ-W3FW7-8HV2C
Eso sí, debemos tener en cuenta que, aunque las claves son legales, no nos van a activar Windows permanentemente. Lo que van a hacer estas claves es activar una especie de «periodo de prueba» durante el cual podremos hacer uso del sistema operativo sin limitaciones. Cuando se acabe el periodo de prueba tendremos que cambiar la licencia por la que hayamos comprado nosotros. Eso sí, podremos hacerlo desde la Configuración, dentro de «Actualización y seguridad > Activación», no tendremos que pagar de nuevo.
De hecho, en muchas ocasiones vamos a encontrarnos con la situación de que estas claves genéricas no funcionan desde el primer momento. En realidad, se podría considerar como una solución temporal para aquellas situaciones en las que instalemos Windows en un nuevo equipo, pero aún no hayamos obtenido una licencia definitiva. Sea como sea, con el tiempo o sin, recomendamos que intentéis haceros con una para siempre y así beneficiarnos de las ventajas de este sistema operativo.
En el caso de Windows 11, la información relacionada con la clave de licencia del sistema operativo podemos encontrarla dentro del de Configuración igualmente, dentro de Sistema > Activación. Ahí podremos comprobar que la clave está correctamente activada, y, si lo necesitamos, cambiar la clave de licencia del sistema operativo por una nueva.
Si nunca has probado Linux y no quieres tener problemas en forma actualizaciones, la mejor distribución que puedes instalar en la actualidad es Ubuntu, una distribución que se actualiza prácticamente todos los meses, incluye su propia tienda de aplicaciones, y está diseñada tanto para equipos de última generación como para equipos entrados en años. Zorin OS es otra interesante opción si buscamos una interfaz de similar a la clásica de Windows en la barra de tareas situada en la parte inferior al igual que Kubuntu y Kali Linux, aunque esta último no está diseñada para s novatos.
Conseguir clave para máquina virtual
Las máquinas virtuales son perfectas para probar ciertas funciones de nuestro sistema operativo, o tener siempre a mano una versión más antigua de Windows para poder ejecutar, por ejemplo, ciertos programas. Sin embargo, cuando vamos a poner en marcha una de estas máquinas virtuales nos encontramos con un problema: ¿qué pasa con la licencia de Windows? Para poder usar el sistema sin problemas ni limitaciones tenemos que activarlo. Y la clave de nuestro PC principal solo sirve para un equipo, por lo que si la usamos para la máquina virtual (en caso de que sea de tipo Retail), se desactivará el PC principal. Entonces, ¿qué puedo hacer?
Antes que recurrir, excepcionalmente, a un activador, hay una forma de tener un Windows virtual activado de forma 100% legal: descargar la máquina virtual para desarrolladores desde aquí. Estas máquinas han sido configuradas, y activadas, directamente por Microsoft de manera que los s puedan bajar una versión de Windows totalmente legal y usarla sin ninguna limitación. Eso sí, estas caducan cada cierto tiempo, por lo que, cuando expire, tendremos que bajarla de nuevo para seguir utilizándola.
Es recomendable, para evitar perder archivos, almacenar los archivos con los que trabajemos en nuestro PC, no a través de la máquina virtual, ya que una vez deje de funcionar, no vamos a poder acceder a esos datos. Para hacerlo, si utilizamos VirtualBox debemos instalar Virtual Tool y en el caso de WMware instalar las VMware Tools. De esta forma, podemos acceder a la máquina anfitriona (donde hemos instalado VirtualBox o VMware) desde la máquina invitada (sistema operativo que hemos instalado) para almacenar todos los archivos con los que trabajemos. Además, también nos permite copiar y pegar archivos y textos entre ambas máquinas.
Estas versiones son plenamente funcionales y vamos a poder sacarle el mismo partido que una versión normal, incluso más, ya que se trata de la versión más completa que Microsoft lanza al mercado, la versión Enterprise, una versión de Windows con la que vamos a poder todo aquellos que tanto las versiones Pro como Home no nos permite hacen. Eso sí, la limitación de tener que utilizarla a través de una máquina virtual, requiere que el equipo no ande escaso de recursos, ya que, de lo contrario, todo el sistema se verá ralentizado y no merecerá la pena utilizarla. Utilizar una máquina virtual es la mejor opción para utilizar Windows 11 en equipos que no son compatibles oficialmente con Windows 10. También podemos utilizar estas máquinas para instalar y probar aplicaciones que no tenemos muy claro si finalmente vamos a acabar utilizándola de forma habitual.
Si, por cualquier motivo, la máquina virtual se ve infectada por un virus, no hay de qué preocuparse, ya que este no va a salir de ahí. Para eliminarlo, la solución más sencilla para por borrar directamente la máquina virtual y volver a instalarla nuevamente, aunque si queremos conservarla, podemos utilizar Windows Defender para analizar y borrar el virus, malware y demás de los que haya podido contagiarse nuestro equipo.
Problemas y riesgos posibles
Si estás buscando una licencia gratuita de Windows, es posible que te llegues a encontrar con distintos problemas. Es importante que los conozcas, puesto que, de esa manera, podrás estar al tanto y evitar sufrir inconvenientes.
Consecuencias al usar Windows sin activar
Ya se encarga Microsoft de intentar convencernos de diferentes maneras de que adquiramos una licencia de su sistema y lo activemos. De hecho, en la última versión del sistema operativo que tenemos a nuestra disposición desde hace unos meses, nos encontramos con una serie de inconvenientes y molestias dentro del propio software. Estas son precisamente las que os vamos a describir a continuación.
- Marca de agua presente en el escritorio: uno de los elementos presentes en un Windows sin activar y que nos puede resultar molesto, es una marca de agua que se sitúa en el escritorio. La misma deja patente que estamos trabajando en un sistema operativo en el que aún no hemos introducido la correspondiente licencia.
- Mensajes de recordatorio: pero eso no es todo, sino que además y mientras trabajamos con nuestro equipo, aparecerán mensajes que nos recordarán este hecho. Estos se encargan de avisarnos que debemos activar Windows 11 o Windows 10 para disfrutar de todas sus funcionalidades.
- No podemos cambiar la personalización: uno de los grandes problemas ante los que se encuentran aquellos que usen Windows sin activar, se relaciona con la personalización del software. Este sistema nos propone multitud de funciones relacionadas con esta temática, pero no podremos beneficiarnos de las mismas sin una licencia activa. Las limitaciones que encontramos en este apartado son:
- Cambiar el fondo o aplicar temas.
- Cambiar los colores del sistema.
- Modificar la fuente por defecto de Windows.
- Configurar el menú inicio y la barra de tareas.
- Aviso en la aplicación de Configuración: hay varios apartados que se consideran como fundamentales en este sistema operativo. La aplicación de Configuración es uno de ellos. Es por ello por lo que Microsoft ya se encarga de avisarnos acerca de la activación de Windows en este apartado tan habitual. Evidentemente esto se puede convertir en una molestia con el paso del tiempo.
- Sincronización desactivada. Si no tenemos Windows activado, no podremos sincronizar la configuración de Windows con otros PCs.
Antes, un Windows sin activar solo se podía usar durante 30 días. Esta restricción pasó a la historia, y ahora Microsoft ya no nos pone restricciones de tiempo para usar el sistema sin activar.
El riesgo de utilizar KMSpiko
Seguro que también hemos oído hablar a menudo de una herramienta llamada «KMSpiko«. Se trata de un programa especialmente desarrollado para emular un servidor de Windows Key Management Services (KMS) a través del cual poder activar la licencia de un ordenador con Windows. Se puede encontrar en redes torrent, páginas web, en foros o incluido dentro del mismo paquete con el sistema operativo pirateado y todos los sistemas operativos los clasifican como archivo malicioso una vez es detectado en el equipo, por lo que la única forma de poder utilizarlo es desactivando el antivirus, lo que supone un problema de seguridad muy grave para el equipo.
Por lo tanto, este software ilegal no es más que una herramienta que nos va a permitir montar un servidor KMS en el ordenador y usar claves para empresas para activar el sistema operativo. Obviamente, todo ello a través de un proceso totalmente ilegal y muy peligroso para los s. ¿Por qué? Porque realmente no sabemos cómo funciona este programa (o cualquier otro programa basado en él).
KMSpico puede llegar a ser un archivo peligroso, ya que puede contener un virus, por lo que en este caso infectaría el ordenador y sería necesario borrarlo una vez descargado. No todos los antivirus son capaces de detectarlos, aunque es una de las varias amenazas que existen para activar Windows, Office u otras herramientas ajenas a Microsoft.
Como es habitual dentro de los ámbitos del software ilegal (ya sean programas, juegos, sistemas operativos, etc), los piratas informáticos buscan siempre sacar beneficio de todas las situaciones. Y, a costa de activar Windows gratis a los s, suelen esconder malware, o puertas traseras, en los ordenadores de aquellos que confían en este programa. Y esto, a la larga, implica graves problemas de seguridad. Además, debemos destacar la gran cantidad de páginas web maliciosas que nos engañan para bajar este activador y que, en realidad, están bajando malware para infectar nuestro PC.
Otras páginas maliciosas lo que hacen es solicitarte que introduzcas tu dirección de correo electrónico para que, de esa forma, recibas el código que te permita hacer la descarga de la clave. Esta es otra de las vías de ataque habituales en estos momentos y con la cual también tienes que tener cuidado. Además de esto, hay otras formas en las que los cibercriminales intentan poner tu ordenador en riesgo, así que, la mejor manera de evitarlo, es dejar pasar la idea de encontrar una clave de Windows navegando por la red.
Piensa que, en el proceso de conseguir la licencia, lo que podrías estar provocando es que tu ordenador no solo no pueda usar Windows en su versión registrada, sino que abrirás una puerta por la que los hackers podrían atacar tu equipo. Por ello, te recomendamos volver a los métodos que te hemos recomendado antes y que, sin duda, te asegurarán la oportunidad de conseguir la licencia de una manera segura.