Medir y controlar los FPS es una de las tareas básicas para controlar el rendimiento de nuestro ordenador, poder encontrar el equilibrio perfecto entre gráficos y rendimiento y disfrutar al máximo de nuestro hardware con nuestros juegos favoritos. En la red existen muchos programas para medir el rendimiento del ordenador. Steam tiene un contador de fotogramas por segundo, igual que el software de NVIDIA y otros programas que probablemente tengamos en el PC. Y, además, tras una larga espera, Windows 10 también cuenta con esta característica.
En su momento Microsoft estuvo varios meses probando su propio contador de FPS para que formase parte de la Game Bar de Windows 10, concretamente del módulo de rendimiento. Por tanto, una vez llegó de manera definitiva, a partir de ese momento los s que quisieran ya podían probar y usar esta nueva función incluida en el sistema operativo de los de Redmond.
Por tanto, todo ello estuvo disponible a partir del lanzamiento de Windows 10 November 2019 Update, la versión 1909 del sistema. Así esta característica llegó a todos los s y a continuación os vamos a explicar cómo activarla, configurarla y utilizarla.
¿Por qué importan tanto los FPS?
Siempre que hablamos de juegos y del universo gaming, los FPS salen a relucir. Los fotogramas por segundo es una métrica que va asociada en muchas ocasiones al rendimiento de un videojuego en un ordenador concreto. Suponen la cantidad de imágenes que la pantalla muestra cada segundo mientras se juega o se reproduces un video. Por ese motivo hay una lucha constante para ganar esos FPS que hacen que un juego vaya más fluido.
Su importancia radica en que incluyen directamente en la experiencia de juego. Clasicamente, en juegos como Counter Strike o Call of Duty, la diferencia entre unos pocos fps ha podido significar la diferencia entre vivir o morir, ya que se puede tener más o menos ventaja que el rival, precisamente por este aspecto técnico. No hace falta decir que en el mundo de los eSports, los jugadores profesionales intentan lograrlo una alta tasa de FPSs, junto a monitores que tengan una alta tasa de refresco.
Para que se puedan lograr esos altos FPS, es importante contar con un hardware a la altura, ya que no es algo que se pueda lograr por ciencia infusa. La potencia del procesador y de la tarjeta gráfica son muy importantes para determinar cuántos fotogramas por segundo puede generar nuestro PC en un determinado juego, que a su vez, puede ser más o menos exigente. La verdad es que es algo que puede llegar a obsesionar a muchos jugadores, pero en algunos casos puede tener menos importancia de lo que parece, ya que hay juegos en los que los FPS no son tan importantes como en los que hemos mencionado.
No obstante, los FPS también puede ser una señal de la salud general de tu sistema. Una caída repentina de frames puede ser sinónimo de problemas como sobrecalentamiento, controladores desactualizados o software mal optimizado. Estar siempre atentos a los fps no es nada banal, como hemos visto en este post.
Activar el contador de FPS en Windows
El contador de FPS de Windows 10 forma parte de la Game Bar, una característica propia del sistema operativo. Por ello, para poder usarla no tenemos que descargar ni instalada nada más. Además, las actualizaciones de la Game Bar llegan a través de la Microsoft Store de forma automática, por lo que no tenemos que preocuparnos de ellas.
El principal requisito para poder probar este nuevo contador de FPS es tener Windows actualizado. La nueva versión November 2019 Update ya habilita este contador para todos los s. Aunque si no hemos actualizado también podemos activarlo desde el Centro Insider de Xbox, apuntándonos para probar las novedades de la Game Bar.
Por tanto, podemos usar esta configuración también para probar las últimas novedades y mejoras de la barra de juego. Independientemente de si usamos el contador de FPS o no.
Debemos tener en consideración que a medida que pasa el tiempo, muchos de los títulos en forma de juegos que se lanzan al mercado son cada vez más exigentes. Nosotros no podemos cambiar de ordenador, al menos en la mayoría de los casos, cada poco tiempo, más si disponemos de uno relativamente moderno. De ahí que tengamos que adaptar los videojuegos de última generación que ejecutamos, al hardware del que disponemos. Seguro que muchos de vosotros ya sabéis de primera mano que estos juegos nos ofrecen múltiples parámetros que podemos personalizar para así poder jugar sin problemas.
Buena parte de estas características integradas que podemos cambiar hacen referencia a la calidad gráfica que vamos a obtener en la ejecución. Pero siempre será preferible bajar un poco dicha calidad y poder jugar de manera fluida, que encontrarnos con cortes o bloqueos en las partidas. Ahí precisamente es donde podemos sacar un mayor beneficio a este medidor de FPS el que os estamos hablando en estas líneas. Gracias a esta sencilla función integrada en Windows podremos ver el rendimiento de esos juegos que ejecutamos para valorar si debemos hacer cambios en su configuración.
Cómo activar el visor de FPS en Windows
Este contador de FPS forma parte del módulo de rendimiento de la Game Bar o Barra de Juego, como también se la conoce. Lo primero que debemos hacer, si no la tenemos activada, es activar esta barra de juego que os comentamos. Para ello iremos al menú de Configuración, dentro de Juegos, y activaremos esta barra.
Y es que, si no activamos este elemento en el sistema operativo de Microsoft, no podremos beneficiarnos de todas sus funciones en el futuro. Aquí se incluyen algunos elementos relacionados con nuestras partidas y otros para interactuar con s y mejorar nuestra experiencia a la hora de jugar en Windows.
Sin duda, un excelente software de control de rendimiento de nuestro ordenador. Lo que los jugadores de PC merecemos.
También merece la pena saber que podemos maximizar o minimizar esta ventana de rendimiento de la que os hablamos dependiendo de nuestras necesidades o preferencias. Con esto queremos decir que podemos personalizar la misma para que tan solo se muestren los datos numéricos de los FPS, o ver en pantalla toda la información de rendimiento unida al útil gráfico que nos muestra la evolución de ese rendimiento a lo largo de los últimos 60 segundos.
Para ello no tenemos más que pulsar sobre la flecha horizontal que se sitúa en la esquina inferior derecha de la ventana de la que estamos hablando. Con tan solo pinchar sobre la misma haremos que aparezca o desaparezca la gráfica en cuestión y se quede así de forma predeterminada cuando ejecutemos nuestros juegos. Esto nos será de enorme utilidad para ajustar el tamaño de dicha ventana de rendimiento dependiendo de lo que preferimos tener en pantalla en todo momento.
Qué funciones debería incluir este plugin
La verdad es que Microsoft ha hecho, de forma sencilla, lo que muchos jugadores buscaban para tener controlado el rendimiento del ordenador. Sin embargo, siempre hay margen de mejora. Ahora mismo, este plugin es capaz de medir, y mostrar en una gráfica, lo siguiente:
- U (el consumo de procesador)
- RAM (la memoria ocupada y disponible)
- VRAM (la memoria gráfica)
- GPU (el uso de la gráfica)
- FPS (los fotogramas por segundo del juego)
Aunque es un plugin completo y sencillo, hay algunas funciones que los jugadores echamos de menos. Y una de ellas es la posibilidad de medir la temperatura. Igual que muchos programas nos permiten monitorizar la temperatura de la GPU y la U, esta función es lo único que le falta a la barra de juego para ser perfecta. Es más, curiosamente, Windows no tiene ninguna función ni herramienta nativa que nos permita leer las temperaturas del hardware, y por ello siempre debemos recurrir a herramientas de terceros para poder controlar estos valores.
La verdad es que a Windows 10 ya no van a llegar muchas más mejoras, y el resto de su ciclo de vida será de mantenimiento. Pero Windows 11, y su apuesta por los videojuegos, sí que podría mejorar este complemento y hacerlo mucho más útil. Y, si no, algún desarrollador subirá un plugin a la tienda de extensiones de la Game Bar para poder controlar esta característica.
Además el propio sistema operativo de Microsoft también podría incluir algún tipo de test o benchmark de forma predeterminada que podamos utilizar para medir el rendimiento de nuestra gráfica integrada en el ordenador. De esta manera podríamos configurar mucho mejor los juegos en base a dicho rendimiento y mejorar nuestra experiencia al jugar en Windows. Evidentemente este benchmark del que os hablamos se debería actualizar cada cierto tiempo para adaptarse a los tiempos que corren. Y es que todo aquello relacionado con los juegos de PC y su rendimiento avanza a pasos agigantados, algo a lo que Microsoft debería estar atenta.
Alternativas para monitorear los FPS de un videojuego en Windows
Si queremos monitorear los FPS de un Videojuego en Windows, además de utilizar las opciones que nos ofrecen los juegos de forma nativa y los lanzadores de las respectivas tiendas de videojuegos, también podemos echar manos de programas de terceros. A continuación, vemos algunos ejemplos al respecto.
MSI Afterburner
Esta herramienta creada por MSI es utilizada principalmente para realizar overclocking en nuestra tarjeta gráfica, por lo que también incluye un contador de FPS. También nos permite crear diferentes perfiles de overclock, por ello logramos aprovechar al máximo el rendimiento que nos ofrece el hardware de nuestro PC. Este programa se encargará de mostrarnos los PFS en cualquier esquina de la pantalla. Además, nos muestra otros datos como la velocidad de reloj, la temperatura y el voltaje. MSI Afterburner es un programa gratuito que podemos descargar desde su
Para activar esta función en Steam, debemos acceder al apartado Parámetros. De este apartado, en el de la izquierda, pulsamos en En la partida. Seguidamente, en la columna de la derecha, nos dirigimos al cuadro Contador de FPS en la partida y pulsamos en el cuadro des plegable para seleccionar la ubicación donde queremos que se muestra esa información y el color que se utilizará para mostrarla.
Bueno y malo
Se trata del cliente que instalamos en el equipo de una de las tiendas más conocidas y usadas en todo el mundo. Está al alcance de cualquiera que tenga una cuenta y esté registrado en la plataforma.
Las opciones personalizables aquí son bastante más escasas de las que podemos encontrar en algún software específico dedicado a estas tareas de medir los FPS.