El navegador web es, probablemente, el programa con el que pasamos más tiempo. Gracias a él podemos visitar cualquier página web, leer la prensa, ver nuestro correo, consultar las redes sociales, y mucho más. Si llevamos ya bastantes años usando un ordenador, seguro que alguna vez hemos oído hablar de Internet Explorer, e incluso de Netscape. Sin embargo, hoy en día los navegadores que más se llevan son Chrome, Edge, Firefox, Chromium, Opera, Brave y Vivaldi. Sin embargo, de todos ellos, ¿cuál es el mejor?
Es muy complicado decir que un navegador web es mejor que otro, ya que casi todos (menos Firefox) utilizan hoy en día la misma base, Chromium, sobre la cual van añadiendo, o eliminando, funciones según los intereses de cada desarrollador. Por tanto, la elección del mejor navegador, por lo general, suele depender de los gustos, o costumbres, de los s.
Cualquiera de los navegadores de los que vamos a hablar nos van a permitir navegar, sin problemas, por toda la red. Todos ellos son compatibles con las últimas tecnologías y APIs web, y no nos van a dar problemas. Por lo tanto, como decir que un navegador es mejor que otro, vamos a intentar, objetivamente, y con pruebas, averiguar cuál de ellos es el mejor, tanto teniendo en cuenta sus ventajas como el rendimiento en los distintos tests de rendimiento de navegadores que podemos encontrar en la red.
Características de los navegadores
Prácticamente todos los navegadores nos van a ofrecer las mismas características a la hora de utilizarlos. Es decir, vamos a tener una interfaz muy sencilla, pestañas para navegar por varias páginas a la vez, marcadores, historiales, la posibilidad de guardar nuestras contraseñas, generar contraseñas seguras, modo de navegación privada, soporte para extensiones… todo lo que podemos desear en cualquier navegador.
Lo cierto es que, con el paso de los años y el importante crecimiento en cuanto a uso de estos programas en concreto, muchos de sus desarrolladores han implementado las mismas funciones. Evidentemente nos referimos a características básicas que todos, o prácticamente todos, integran de forma predeterminada. Llegados a este punto podríamos decir que son tres los apartados que se tienen en cuenta a la hora de crear un nuevo navegador web. Por un lado, nos encontramos con la funcionalidad que nos ofrece, por otro la seguridad, y por último el aspecto o interfaz de .
Navegadores de Internet a utilizar en Windows
A continuación, os vamos a hablar de algunas de las propuestas de estas características más importantes que podéis descargar y utilizar en estos momentos en el sistema operativo de Microsoft. Hay que tener en cuenta que los navegadores web de los que os hablamos son gratuitos con todas sus funciones disponibles desde un principio. Por tanto, en multitud de ocasiones lo mejor será probar aquellos que pensemos que más se adapten a nuestras necesidades para decantarnos por el más interesante. Veamos las ventajas e inconvenientes de los títulos más representativos en este sector del software.
Firefox
Si algo debemos destacar del navegador de Mozilla es que se trata de un navegador de código abierto y siempre ha buscado ser una opción mucho más privada que sus principales rivales. Firefox es de los pocos (por no decir el único) que no ha sucumbido al poder de Chromium y sigue utilizando su propio motor independiente. Se trata de un navegador web más rápido y ligero, con una mejor gestión de la memoria y de los procesos y subprocesos, o al menos así lo vende su desarrolladora, que sus dos principales rivales directos. También, uno de sus puntos fuertes es el bloqueador de rastreadores, y los diferentes niveles de privacidad que podemos elegir.
Además, este navegador nos permite activar un modo de navegación mucho más privada, llamado «modo Tor», gracias al cual vamos a poder conectarnos a Internet de forma mucho más anónima, impidiendo que las grandes corporaciones puedan rastrearnos. También cuenta con seguridad IPFS para mucha mayor seguridad en la navegación.
Su inconveniente es que este navegador intenta llevar a los s hacia su propio beneficio. Por ejemplo, ofrece la posibilidad de ver anuncios personalizados en las webs mientras se navega a cambio de unos «tokens» (BAT) que, después, se pueden cambiar por criptomonedas. Una práctica algo fea y deshonesta.
Si quieres esta privacidad, empieza por descargar Brave desde la web del navegador. La versión usada en estas pruebas ha sido la 1.35.103 (Chromium: 98.0.4758.102).
Top y menos top
No cabe duda de que la principal característica que define a este navegador de Internet es la seguridad y privacidad que sus desarrolladores nos proporcionan. De manera, predeterminada bloquea todo tipo de contenidos que se consideren perjudiciales para el y que provengan de internet. Cuenta con un denominado como Modo Tor para los más cuidadosos de su privacidad al navegar. En determinadas circunstancias esta propuesta nos intenta llevar a su camino para así obtener beneficios relacionados con la navegación que llevamos a cabo. Esto es algo que por ejemplo realiza con determinados anuncios que nos muestra, todo ello a cambio de una serie de tokens, lo que no termina de convencer a los s del navegador.
Comparativa de compatibilidad, ¿quién navega mejor?
Para ver cuál de estos navegadores ofrece a los s mejor compatibilidad con los estándares web y nos va a dar menos problemas al visitar las páginas web, vamos a medir las puntuaciones de todos los que acabamos de ver en tres tests diferentes. Por un lado, vamos a usar la prueba HTML5, la cual mide la puntuación de los navegadores a la hora de trabajar con los estándares de este lenguaje de programación. Y las puntuaciones obtenidas son:
- Firefox: 467/555
- Google Chrome: 476/555
- Microsoft Edge: 476/555
- Chromium:476/555
- Opera: 474/555
- Vivaldi: 476/555
- Brave: 528/555
A continuación, usaremos la prueba CSS para medir qué tal se comportan los navegadores usando los estándares de diseño web CSS. En esta podremos ver en detalle todo lo que procesa, o no procesa, correctamente nuestro navegador web. Los resultados obtenidos son:
- Firefox: 66%
- Google Chrome: 62%
- Microsoft Edge: 62%
- Chromium: 63%
- Opera: 62%
- Vivaldi: 62%
- Brave: 62%
Y, por último, vamos a usar la prueba Acid3 para ver qué tal siguen soportan los navegadores estándares y funcionamientos antiguos que no están incluidos dentro de los estándares HTML/CSS que acabamos de ver en los pasos anteriores. En estas pruebas hemos obtenido las siguientes puntuaciones:
- Firefox: 97/100
- Google Chrome: 97/100
- Microsoft Edge: 97/100
- Chromium: 97/100
- Opera: 97/100
- Vivaldi: 97/100
- Brave: 97/100
Por supuesto, todas las pruebas se han realizado sin extensiones ni más configuraciones que las que vienen configuradas de serie en el navegador.
Comparativa de rendimiento, ¿quién es más rápido?
Después de comprobar su compatibilidad, ahora le ha llegado el turno al rendimiento. Para ello, igualmente vamos a usar 3 tests especializados en medir qué tal se comporta el navegador al realizar ciertas tareas.
La primera que vamos a usar va a ser la prueba Octane 2.0, un test en el que vamos a poder medir el rendimiento del navegador al realizar todo tipo de tareas criptográficas, así como al hacer distintas llamadas a otros servidores proxy. Los resultados obtenidos son:
- Firefox: 25901
- Google Chrome: 51387
- Microsoft Edge: 51854
- Chromium: 49643
- Opera: 51054
- Vivaldi: 49934
- Brave: 49106
Curiosamente, el ganador en esta categoría es Microsoft Edge, el navegador por defecto de Windows. Y, el perdedor, Firefox (a pesar de haberle repetido la prueba dos veces más, sin apenas un 1% de variación).
En segundo lugar, vamos a usar otro de los tests más comunes a la hora de medir el rendimiento de un navegador, la prueba SunSpider. Gracias a ella vamos a poder medir la velocidad de intercambio de datos del navegador con otros servidores a través de JavaScript. Los resultados obtenidos en esta segunda prueba son:
- Firefox: 134.3 ms
- Google Chrome: 149.8 ms
- Microsoft Edge: 160.1 ms
- Chromium: 165.1 ms
- Opera: 161.5 ms
- Vivaldi: 164.3 ms
- Brave: 170.9 ms
En esta segunda prueba, Firefox sí ha sido el ganador, obteniendo los tiempos más bajos. Y, el perdedor, ha sido Brave, obteniendo una puntuación bastante superior a la de sus competidores.
Y, por último, vamos a ejecutar la prueba Jet Stream. Esta es la más completa y fiable que podemos ejecutar, ya que se encarga de realizar un benchmark JavaScript y WebAssembly para medir qué tal arranca el navegador y cómo de rápido ejecutar y procesa el código. Los resultados de los navegadores en este test son los siguientes:
- Firefox: 98755
- Google Chrome: 155219
- Microsoft Edge: 151979
- Chromium: 143638
- Opera: 150692
- Vivaldi: 146677
- Brave: 145034
En esta última prueba podemos ver cómo el que mayor puntuación ha obtenido en las pruebas ha sido Google Chrome, dejando a Firefox, por segunda vez, como la peor alternativa.
*Todas las pruebas se han realizado una a una, con todos los demás navegadores y programas cerrados, y sin extensiones ni configuraciones, tal cual se instalan en el PC.
Comparativa de gasto de RAM, ¿qué navegador es más ligero?
Sobre el papel, las pruebas anteriores pueden estar bien, pero lo que nos interesa a nosotros es saber, en la práctica, cuando lo ejecutamos en el navegador, qué navegador es el que más memoria RAM gasta o el que más utiliza la U y hace que el PC vaya lento. Lo primero que vamos a hacer es abrir todos los navegadores limpios, con solo la página de inicio de los mismos, para analizar los resultados.
El que menos memoria consume de todos ha sido Chromium, con menos de 800 MB en total, mientras el que más ha consumido ha sido Microsoft Edge. Por desgracia, Chromium no tiene aceleración por hardware, lo que se traduce en un peor rendimiento y un gasto de U, generalmente, superior. En cuanto a consumo de GPU, Google Chrome ha sido el que más ha consumido, mientras que Firefox ha sido el que menos la ha usado.
La seguridad: muy importante
De nada sirve que un navegador sea rápido y ligero si convierte nuestro ordenador en un colador y pone en peligro nuestra seguridad y privacidad. Así, para averiguar qué navegador es el más seguro, vamos a usar una plataforma llamada BrowserAudit. Este es un servicio gratuito para probar qué tal funcionan las funciones y los estándares de seguridad más comunes que deben tener los navegadores web. En total, se realizan unas 400 pruebas de seguridad, y al acabar, nos muestra un resumen de las mismas.
Los resultados obtenidos con estas pruebas de seguridad son los siguientes (formato: Correctos/Advertencia/Criticos/Omitidos):
- Firefox: 377/7/0/20
- Google Chrome: 356/27/1/20
- Microsoft Edge: 361/22/1/20
- Chromium: 367/16/1/20
- Opera: 364/19/1/20
- Vivaldi: 367/16/1/20
- Brave: 367/16/1/20
*El fallo crítico que todos, menos Firefox, comparten es el envío de cookies JavaScript a través de HTTP en lugar de hacerlo a través de HTTPS.
Visto así, el navegador más seguro, y que mejor nos protegerá al navegar por Internet, es Firefox. Y, en este casi, el peor de todos es Google Chrome.
Cuál es el navegador más utilizado en Windows
Los resultados de los análisis de rendimiento, seguridad y de consumo de RAM que os hemos mostrado más arriba, lamentablemente no coinciden con las preferencias de uso de la mayoría de los s, s que no se molestan en comprobar que prestaciones ofrece uno y otro navegador y siempre optan por la solución más sencilla.
Chrome no es el mejor navegador para Windows. De hecho, no hay ningún navegador de todos los que hemos analizado en este artículo que supere por encima al resto y lo conviertan en el candidato ideal.
Sin embargo, Chrome es el navegador más utilizado con una cuota del 65,8% (según los datos de Statcounter en abril de 2023). El navegador de Google domina el mercado de los navegadores gracias al buscador, buscador que, si detecta que no estamos utilizando Chrome, invita al descargar y probarlo, un llamamiento que siguen la mayoría de los s.
En segunda posición, encontramos Edge, el navegador de Microsoft basado en Chromium que permite instalar las extensiones disponibles para Chrome. Este navegador, es el que se encuentra instalado de forma nativa tanto en Windows 10 como en Windows 11 y hoy en día es utilizado por el 11,13% de los s. Safari, navegador que carece de versión para Windows, se sitúa en tercera posición con 10.92% de cuota.
Firefox se encuentra en cuarta posición con una cuota del 6,49%, un navegador que ha perdido muchísima cuota de mercado en los últimos años en favor de Chrome. Opera se sitúa en la quita posición con una cuota del 3.17%.
Conclusión: ¿cuál es el mejor navegador?
Entonces, según todas estas pruebas, ¿cuál podríamos decir que es el mejor navegador web?
Si nos fijamos en las pruebas de compatibilidad HTML5, Brave ha sido el que más ha destacado en las mismas, obteniendo el resultado más alto y dejando a sus rivales por debajo de él. Aunque la diferencia es muy poca, y no vamos a tener absolutamente ningún problema, aunque usemos cualquiera de los otros navegadores web. Por otro lado, el que peor nota ha obtenido en este sentido ha sido Firefox, aunque el navegador de Mozilla luego recupera en las pruebas de compatibilidad CSS.
Entonces, si buscamos el navegador más compatible, no nos queda otra que darle el premio de mejor navegador web a Brave. Y el navegador menos compatible, Firefox.
En las pruebas de rendimiento, aunque hemos realizado tres pruebas diferentes, la más completa y fiable en términos de benchmark para navegadores es Jet Stream. Y en estas pruebas, el que mejor nota ha sacado ha sido Google Chrome, bastante por delante de todos los demás navegadores web.
Por lo tanto, si queremos el navegador más rápido, debemos escoger ciegamente Google Chrome. Por desgracia, de nuevo, el peor ha sido Firefox, el navegador de Mozilla, quien ha obtenido la nota más baja en este benchmark.
¿Y qué pasa en un entorno real? Lo primero que vamos a hacer es dejar fuera de las pruebas a Chromium, ya que, al no tener aceleración por hardware, no es una opción recomendable para el día a día, ya que en muchas webs (sobre todo aquellas con contenido multimedia) tendremos problemas. Así que, obviando a este navegador, los dos que menos memoria RAM consumen nada más abrirlos son Edge y Google Chrome. Y, a pleno rendimiento, los dos más optimizados y que menos memoria gastan son Google Chrome y Opera.
Así pues, el navegador más ligero, que consume menos memoria RAM, es Google Chrome. Y el que más memoria RAM consume en el PC es Microsoft Edge, seguido muy de cerca por Firefox,
Por último, si lo que queremos es el navegador más seguro, entonces ya sí que debemos dejar de lado a Google Chrome, y a todos los navegadores que comparten motor con él, y apostar por la única alternativa que no pasa por el aro de Google: Firefox. Por último, el que peores prácticas de seguridad tiene es Google Chrome, que, casualmente, es el navegador web más utilizado en todo el mundo.
Pero debido principalmente a la amplia variedad de títulos de los que podemos echar mano en este sector del software, quizá lo más interesante sea probar varios de ellos para elegir el que más nos interese en cada caso. Además hacemos varios usos de estos navegadores web, por lo que quizá deberíamos utilizar más de uno dependiendo del entorno en el que nos encontremos. Y es que no es lo mismo utilizar un navegador a nivel profesional para hablar con clientes o compartir documentos sensibles, que para ver películas en Netflix desde casa.
Tor Browser, la alternativa más privada
Si algo nos ha quedado claro a la hora de elegir un navegador u otro para movernos por Internet en el día a día con el PC, es que la privacidad y la seguridad son de los elementos más importantes. Estos deben deben ofrecernos todo tipo de funciones y herramientas personalizables para establecer diferentes niveles y protegernos contra los riesgos online. Si nos centramos en la privacidad ante todo tipo de seguimientos que nos hacen las webs que visitamos, los atacantes maliciosos, o incluso nuestro propio proveedor de internet, muchos echan en manos de las ventanas de incógnito que nos ofrecen y la mayoría de estos programas.
Sin embargo debemos tener en consideración que este modo de navegar poco difiere ver las ventanas normales. La principal diferencia es que en el modo de incógnito no se almacenan datos de navegación en el propio programa, pero los seguimientos por parte de terceros siguen siendo prácticamente los mismos. Y ahí es donde precisamente entra en juego el que se podría considerar como el navegador privado por excelencia, Tor Browser que podemos bajar desde aquí.
Esta es una aplicación que utiliza su propia red privada compuesta por nodos individuales que aseguran nuestra privacidad online. De ahí que cada vez un mayor número de s se decanten por esta otra propuesta al margen de las más comerciales que os hemos mencionado en estas mismas líneas. Además multitud de s utilizan esta alternativa para moverse por la denominada como Deep Web. Cierto es que para disponer de toda esta privacidad que os mencionamos, sacrifican buena parte de las fluidez de funcionamiento y velocidad en la carga de webs que proponen otros programas de este tipo.
Pero con todo y con ello es una propuesta que deberíamos tener muy en cuenta si queremos priorizar de la privacidad online por encima de todo. Además es un navegador con funciones específicas que se centran en este tipo de tareas, incluso en su configuración predeterminada.
Navegadores menos conocidos pero muy interesantes
En mayor o menos medida, siempre tenemos en el oído los navegadores más utilizados por los propios s. Estamos hasta el gorro de escuchar hablar de Chrome, Firefox, Edge, o alternativas más secundarias. Pero existen unos navegadores que son aún más de nicho que los que hemos expuesto. Y aunque sean menos conocidos, tienen algo que les diferencia del resto.
Waterfox
Este navegador, que basa su funcionamiento en Firefox, se encuentra diseñado y optimizado para aquellos ordenadores que no tienen tanta potencia como los actuales. Es decir, que si tu ordenador está rondando los 5-10 años, Waterfox puede exprimir todas sus funcionalidades sin que se sienta un navegador pesado. Y lo hace porque de su funcionamiento elimina elementos de telemetría y rastreo que, por contra, sí que incluye Firefox. Además, no renuncia a la compatibilidad con las extensiones del navegador de Mozilla, y sigue siendo una opción más privada.
Por lo que podemos decir que su mayor ventaja es que puede funcionar prácticamente al máximo en cualquier PC y es muy ligero y respetuoso con nuestra privacidad. Por contra, podemos decir que no se actualiza con tanta frecuencia como lo hacen los navegadores de primera línea, por lo que podemos tener alguna incompatibilidad con algunas webs de manera muy ocasional.
LibreWolf
Este navegador también se basa en Firefox para su funcionamiento, pero otra otro camino completamente distinto. Es un navegador blindado contra rastreadores y no incluye ninguna integración con los servicios propios de Mozilla. Además, también elimina toda la telemetría, por lo que borra todas las huellas que dejamos al navegar.
Su enfoque absoluto en la privacidad lo hace muy atractivo para los s que quieren un perfil bajo, y no hace falta que configuremos nada extra, pero también, por su política tan restrictiva de privacidad, puede bloquear funciones esenciales de algunas páginas web.
En qué me debo fijar al elegir un programa
Los tres apartados son sumamente importantes a la hora de elegir una propuesta u otra. Todo ello a pesar de los puntos comunes tales como el historial, las pestañas, la barra de navegación, las extensiones, las funciones de seguridad, y otras muchas cosas a las que ya nos hemos acostumbrado. Por tanto, se podría decir que, en este caso, en los detalles se encuentra la principal diferencia. Esto quiere decir que nos podemos encontrar con aplicaciones que se centran básicamente en la privacidad que ofrecen a sus s.
Otros navegadores prefieren diferenciarse del resto por ser más ligeros, ocupar menos espacio en las unidades de disco y consumir menos recursos. Asimismo, los hay que intentan cargar las páginas lo más rápido posible, o nos ofrecen una interfaz totalmente original y personalizable. Una vez sabemos todo esto que os hemos contado, entonces…
Dónde se encuentra la diferencia para elegir bien
Si tenemos en consideración que la mayoría de los equipos están perfectamente capacitados para permitirnos ejecutar estos programas sin problemas, lo que ocupen en disco pasa a un segundo plano. Por tanto, aquí se tienen en consideración otros parámetros muy importantes como por ejemplo las medidas de seguridad por defecto que su desarrollador nos ofrece de antemano. Hay navegadores especialmente diseñados para cuidar de nuestra seguridad y privacidad como por ejemplo sucede con Mozilla Firefox o Tor Browser. Quizá estas no sean las alternativas más rápidas a la hora de cargar webs o funcionar en nuestro equipo.
Sin embargo, si priorizamos todo aquello relacionado con la privacidad, sin duda estas son dos de las mejores opciones que podremos elegir. También hay s que buscan ciertas características y modos de funcionamiento un poco más especial de forma predeterminada como por ejemplo sucede en el caso de Opera. Este es un navegador también muy popular que nos presenta s directos a algunas aplicaciones web muy útiles de forma predeterminada. De igual modo nos ofrece su propia VPN para así navegar de forma segura y anónima, algo que no encontramos en la mayoría de los navegadores restantes de otros desarrolladores.
Problemas habituales de estos programas
A pesar del enorme uso que en estos instantes tienen estos programas de los que os hablamos para movernos online, también son de los que más críticas reciben en términos generales. Y es que en ocasiones presentan graves problemas canto de consumo de recursos cómo relacionados con la seguridad, algo por lo que casi nadie quiere pasar. Esto es algo que se hace especialmente patente si nos centramos en el programa de este tipo más usado que hay en el mundo, que no es otro que Google Chrome.
Como os contamos, en ciertas ocasiones el consumo tanto de procesador como de memoria RAM del navegador que usamos habitualmente puede ser excesivo. Y son varios los factores que juegan en este sentido. Por ejemplo se puede dar el caso de que trabajemos con un navegador en el que hemos instalado y tenemos activas demasiadas extensiones. Deberíamos limitar su uso tan solo a aquellas que se puedan considerar como indispensables. Lo mismo sucede con las pestañas que tenemos en ejecución de manera simultánea.
Esto puede hacer que el programa como tal a un consumo elevado de recursos y bloquee el resto de aplicaciones en ejecución. Evidentemente todo ello se puede convertir en un serio problema en nuestra sesión de uso con el ordenador.
Por otro lado nos encontramos con todo aquello relacionado con la seguridad, otro de los apartados más importantes en este sector del software. Al margen de las precauciones que tomemos por nosotros mismos a la hora de visitar ciertas páginas web, también deberíamos mantener el navegador como tal actualizado en todo momento. Las vulnerabilidades y agujeros de seguridad aquí suelen ser bastante habituales y aprovechadas por los actores maliciosos.