Esta versión de Windows 10 seguirá recibiendo actualizaciones gratis ¡hasta 2032!

El 14 de octubre de este año, después del verano, Windows 10 pasa a mejor vida. Uno de los sistemas operativos más queridos, junto con Windows XP y 7, dejará de recibir soporte y actualizaciones, quedando a los s que aún confían en él abandonados a su suerte y solos ante ataques informáticos. Microsoft recomienda, de todos modos, actualizar a Windows 11 cuanto antes. Pero lo que no te cuenta es que esconde un as bajo la manga: una edición que seguirá recibiendo actualizaciones 7 años más.
Microsoft ofrecerá a empresas y s domésticos la posibilidad de seguir recibiendo actualizaciones en Windows 10 a cambio del pago de una cuota. Esta cuota se duplicará año tras año, siendo posible alargar hasta 3 años más la vida útil del sistema. Pero, cuando se acabe este soporte extendido, en octubre de 2028, sí o sí quedará totalmente abandonado.
Sin embargo, la edición de la que os hablamos hoy no solo nos permitirá seguir usando Windows 10 con parches de seguridad, sino que nos permitirá hacerlo de forma totalmente gratuita hasta el año 2032.
Windows 10 IoT Enterprise LTSC
Aunque su nombre puede disuadir, esta edición de Windows 10 es perfecta, tanto para uso doméstico como para uso en empresas. Se trata de una edición de Windows 10 pensada, sobre todo, para su uso en dispositivos del Internet de las Cosas. Pero es totalmente utilizable dentro de cualquier PC de casa. Incluso cuenta con varias ventajas que las otras ediciones no tienen.
Por ejemplo, lo primero que conseguimos, y lo más importante, es el soporte extendido. Al tratarse de una edición LTSC, lanzada en 2021, nos garantiza actualizaciones a largo plazo, en concreto hasta el 12 de enero del año 2032. Aunque sí es cierto que no va a recibir nuevas funciones ni características, hasta esa fecha sí recibirá todo tipo de parches, tanto de calidad como, sobre todo, de seguridad.
Pero el soporte no es su única ventaja. Y es que esta edición viene sin bloatware ni programas innecesarios de Microsoft. Se trata de la edición más limpia y ligera que podemos encontrar. Se caracteriza también por arrancar más rápido, gastar menos RAM y espacio del disco duro, y ser mucho más estable que la edición clásica de Windows 10.
Además, la instalación no obliga a tener una Cuenta Microsoft, ni Internet, ni requisitos especiales como el uso de TPM 2.0, Secure Boot, o una U de última generación.
¿Su hándicap? Muy sencillo: se trata de una edición pensada para empesas, y su licencia no se puede comprar así como así. Por suerte, hay webs que venden claves para las ediciones IoT de Windows 10 por muy pocos euros. Y, de esta forma, podemos usar el sistema de forma 100% legal durante, por lo menos, 7 años más.
Otras opciones para abandonar Windows
Aunque es una alternativa, no deja de ser un parche temporal. Pan para hoy, hambre para mañana, como dice el refrán. Y es que, tarde o temprano, llegarán los problemas.
Microsoft insiste en que debemos comprar un ordenador nuevo para poder actualizar a Windows 11 y aprovechar así todas las ventajas de este nuevo SO. Nosotros preferimos apostar por otras alternativas, como, por ejemplo:
- Usar Rufus para eliminar las restricciones de Windows 11 y poder instalarlo sin problemas en cualquier PC.
- O bien dar, de una vez por todas, el salto a Linux. Ubuntu es una gran opción para empezar. Y, créenos, no echarás nada de menos Windows.