Algunas teclas de mi teclado no funcionaban: con estos consejos conseguí repararlas sin tener que comprar uno nuevo

El teclado de nuestro PC es el compañero de viaje del que más hacemos uso mientras navegamos, solo por detrás del ratón. Y es posible que te hayas encontrado alguna vez con el problema de que algunas teclas no funcionan sin explicación aparente. La frustración que ello conlleva puede llevar a la compra de un nuevo teclado.
Pero antes de continuar con ello, existen multitud de soluciones que puedes intentar, y que vamos a ver en este artículo. Por ejemplo, puedes limpiar físicamente el teclado para evitar cualquier error mecánico, o incluso actualizar drivers que afecten al teclado. Existen diversas formas para solucionar el problema sin desembolsar el dinero en otro teclado. Y vamos a desgranar las que mayor resultado dan de cara al público.
Limpia físicamente el teclado
Cualquier tipo de residuo, como el polvo o los restos de comida, puede interponerse entre las teclas y su base e impedir el correcto o entre ambas. Puedes optar por desconectar el teclado para manipularlo, y dependiendo del tipo que tengas, puedes darle la vuelta para que la gravedad desprenda cualquier tipo de resto.
Yo, alguna vez, he utilizado aire comprimido para limpiar debajo ellas, pero también puedes utilizar un paño ligeramente humedecido para no dañar los componentes electrónicos, si los hubiera.
Actualización de drivers
Puede ocurrir que, por cualquier motivo, los drivers hayan sufrido algún traspié. Por lo que vamos a ver cómo actualizarlos.
Para ello, pulsa la combinación Win + X (si te deja el teclado) o selecciona « de dispositivos» haciendo clic derecho en el menú de inicio. En la parte «Teclados», busca el tuyo y haz clic derecho sobre él. Selecciona «Actualizar driver» y sigue las instrucciones para que se actualicen con éxito.
Utiliza el solucionador de problemas
Windows nos ofrece una opción nativa para solucionar problemas de este tipo. Para ello, abre configuración con Win + I y dirígete a «Actualización y seguridad». Aquí, selecciona «Solucionar problemas».
Dentro de la herramienta «Solucionador de problemas», escoge la opción relacionada con el teclado.
Esto podría poner fin a tus quebraderos de cabeza con el teclado.
Verifica las conexiones del teclado
En caso de que el teclado funcione por conexión USB por cable, revisa que el cable esté bien conectado al puerto USB y que no tiene ningún tipo de falla. Es más, puedes probar a utilizar otro puerto para ver si el fallo no es del teclado en sí mismo, sino del anclaje en sí mismo.
Por otra parte, si funciona vía bluetooth, asegúrate de que la conexión funciona de manera correcta desde el de control de Windows, accediendo a las conexiones de tu equipo.
Utiliza software para probar las teclas
Existen programas que nos permiten testear las teclas del teclado para que identifiquemos cuáles funcionan y cuáles no. Por ejemplo, KeyTweak es un software gratuito que nos permite testear las teclas y, si encontramos algún defecto, podemos remapear las defectuosas a otras partes del teclado.
También podremos utilizar Keyboard Test. Esta opción es una herramienta online que nos permite verificar el funcionamiento de nuestras teclas sin descargar software adicional.