El asistente de instalación de Windows ha cambiado mucho, para bien, desde sus sistemas más antiguos. Ahora mismo, cualquier puede bajar una imagen ISO oficial, copiarla a un USB y arrancar el PC para instalarlo. Microsoft ha simplificado mucho su asistente, y le ha hecho muy descriptivo e intuitivo para que nadie tenga problemas. Sin embargo, hay un punto en el que siempre que instalo un Windows tengo problemas. Y la culpa es de Microsoft.
Desde el lanzamiento de Windows 10, Microsoft ha insistido mucho en que iniciemos sesión con una Cuenta Microsoft para poder aprovechar al máximo las características del sistema. En los primeros años de Windows 10, el paso era totalmente opcional, aunque poco a poco se ha ido haciendo obligatorio hasta el punto de que, ahora mismo, no podemos crear una cuenta de Windows sin Cuenta Microsoft.
crear una cuenta sin conexión. Sin embargo, las restricciones de Windows van aún más allá.
Obligación de tener Internet, el mayor problema
Tras esta obligación, Microsoft añadió otro requisito para poder instalar Windows 11: tener que estar, sí o sí, conectado a Internet. Esto, en un principio, no debería ser un problema mayor, ya que todos tenemos Internet en casa, o un móvil para crear un punto de . El problema es que, a pesar de que es obligatorio, Microsoft no
Y, además, también vertemos varias ventanas de publicidad donde nos invitará a contratar Microsoft 365, pagar Game , o adquirir otros productos que, seguramente, no nos interesen.
Dongle Wi-Fi: la salida universal
Por suerte, aún hay una salida más para pasar por el estrecho aro de Microsoft. Y es que, conectando un dongle Wi-Fi, el más básico que podemos encontrar en el mercado (como este TP-Link TL-WN823N), es posible saltarnos esta restricción, ver las redes Wi-Fi al alcance, y conectarnos para poder continuar con la instalación de Windows 11.
Cuando tengamos Windows 11 instalado, podemos buscar actualizaciones en Windows Update y, automáticamente, bajará todos los drivers necesarios para nuestro PC, pudiendo desconectar el doble USB de Wi-Fi y conectarnos con la tarjeta de red del propio ordenador.
