Un número creciente de s utilizan su ordenador de sobremesa o portátil para disfrutar al máximo de sus juegos. En la mayoría de las ocasiones utilizamos Windows como sistema operativo en estos equipos, por lo que no estará de más optimizar su funcionamiento para estas tareas.
Lo primero que debemos tener en consideración es que el sistema operativo de Microsoft nos propone una buena cantidad de opciones configurables. Algunas de estas nos permiten sacar el máximo provecho al software que aquí instalamos dependiendo de cuál sea su naturaleza. Como no podía ser de otro modo, esto es algo que alcanza a los juegos en los que nos queremos centrar en estas mismas líneas. En ciertas ocasiones nos podemos encontrar con algunos problemas en la ejecución de estos títulos, especialmente en los más exigentes.
De ahí que a continuación os vamos a hablar de algunos cambios que podréis realizar en el propio Windows para evitar el bloqueo en los juegos y mejorar su fluidez. Asimismo, debemos tener en consideración que Microsoft trabaja para que su sistema sea el más adecuado a la hora de ejecutar este software lúdico en cuestión.
Activar el Modo juego de Windows
Desde hace un tiempo y algunas versiones de Windows, Microsoft puso a nuestra disposición el denominado como Modo juego. Esta es una funcionalidad que encontramos en la aplicación de Configuración del sistema operativo y que por defecto viene desactivada. Cabe mencionar que básicamente, cuando la ponemos en funcionamiento, el propio sistema prioriza la ejecución de nuestros juegos para asignarle los máximos en recursos y así mejorar su funcionamiento.
