No te volverán a colar un deepfake: las 5 claves para detectarlos al instante

Con el auge de la inteligencia artificial, los deepfakes se abren paso entre nuestras redes sociales y webs de una manera cada vez más amplia. Puede que, con tanta terminología digital actual, no sepas aún con exactitud lo que es un deepfake. En este caso, hablamos de un contenido creado por IA que puede parecer real. Generalmente, son manipulados con una intención concreta de beneficiarse.
Pueden ser tanto vídeos como imágenes o audios. Todos ellos pueden ser creados o manipulados por la IA y pueden colárnosla si no estamos bien atentos. La realidad es que este tipo de prácticas amenaza la veracidad que pueda existir en internet. Y en estos tiempos en que los bulos son utilizados como arma política por ciertos sectores, pueden ser extremadamente manipuladores para nuestras opiniones.
Por eso, es primordial que sepas cómo reconocerlos y alejarte de este tipo de contenido, que en ocasiones, puede rozar o ahondar en lo delictivo.
Cómo detectar Deepfakes
Las deepfakes son contenidos multimedia manipulados con IA con una intención clara y perjudicial. No es lo mismo generar o editar un vídeo con IA en tono de humor, donde se vea claramente que no es algo real, que intentar hacerlo pasar por algo verídico. Es ahí donde redunda su verdadero peligro. Aun así, existen algunas aristas que aún podemos detectar en este tipo de contenido basura:
Inconsistencias faciales
La tecnología que crea deepfakes no es infalible (aún). Por lo tal, puede que a la hora de replicar o generar expresiones faciales cometa errores que nos puedan hacer sospechar. Así que, si prestas atención en concreto a los movimientos de la boca o a las expresiones, te puedes dar cuenta de muchas cosas. Probablemente, el parpadeo no tiene por qué ser natural, o los ojos no se mueven de una manera normal. Si ves a una persona con una falta de emociones clara y movimientos faciales y labiales extraños, ya puedes sospechar.
Voces robóticas
El audio de las voces suelen emitir patrones extraños. No es raro que suene robótica, con cortes de tono donde no deberían ir o no se corresponde con el movimiento de los labios. A pesar de que la IA es una herramienta impresionante, aún no sustituye una voz humana natural.
Interacciones raras con objetos
No es muy frecuente que los programas de IA hagan interacciones visuales con objetos, pero aun así, cuando lo hace, la relación entre los objetos y la persona no suele tener un patrón muy convincente. A veces incluso la ropa puede tener un movimiento no acorde con su cuerpo o no crear sombra bajo el cuerpo. Este tipo de detalles son clave.
Búsqueda inversa de imágenes y vídeos
A nuestra disposición también tenemos herramientas como Google Lens o Deepware que son capaces de buscar imágenes o vídeos en internet. Si encuentras una imagen o vídeo en varios sitios con nombres diferentes, es bastante usual que sea falsa. Con el uso de estos programas podemos, por ejemplo, detectar perfiles falsos en redes sociales.
Prueba en directo
Si te encuentras en una videollamada con alguien sospechoso y le pides que mueva la cabeza rápidamente, cualquier tipo de filtro generado por IA sufrirá para generar el movimiento y desaparecerá toda naturalidad.