A lo largo de los años, solo unos pocos navegadores web han conseguido conquistar el pódium. La parte más alta de este la conquistó Internet Explorer en sus años buenos, y después tan solo Google Chrome ha conseguido destronarlo. Sin embargo, la guerra de los navegadores está más viva que nunca. Y es posible que pronto veamos nuevos cambios.
Edge se basa en Chromium, pero cambia muchas cosas que no gustan a los s del navegador de Google, como la recopilación de datos por parte de Google, además de añadir una gran cantidad de funciones y características que no están disponibles en el navegador de Google. Gracias a ello (y a que viene instalado por defecto en Windows, no nos engañemos), este navegador cuenta con una cuota de mercado del 13.74%, con un aumento considerable del 0.39% respecto a la anterior medida.
Por debajo de estos dos ganadores indiscutibles nos encontramos a Safari, el
El resto de los navegadores tienen una presencia prácticamente irrisoria dentro de estos dispositivos. El único que se salva es el navegador de Samsung, con poco más del 4%. Pero ni Firefox, ni Edge ni ningún otro navegador puede hacer sombra a los dos líderes indiscutibles.