Microsoft prohibe el uso de DeepSeek: los motivos de la guerra abierta contra esta IA

Microsoft ha prohibido el uso de DeepSeek, la famosa alternativa gratuita a ChatGPT centrada en la investigación, dentro de todos sus equipos corporativos. ¿Por qué? Esta decisión ha pillado por sorpresa al mundo de las grandes tecnológicas. Y lo más grave de todo es que este tipo de medida se produce en pleno ascenso imparable de las IA.
Recordemos que DeepSeek llegó a principios de este año como un verdadero meteorito al panorama de la inteligencia artificial. De tal calibre fue su aterrizaje, que Nvidia sufrió su peor caída en bolsa de la historia, y occidente aún tiembla ante una IA tan potente de código abierto que se enfrenta sin temor a todas las opciones comerciales. De hecho, muchos desarrolladores, investigadores y s estándar han adoptado DeepSeek como chatbot de IA favorito, en lugar de ChatGPT. Pero Microsoft ha dicho «hasta aquí», y es que considera su uso como un riesgo potencial para la privacidad de sus datos…
Podemos resumir esta prohibición en dos factores concretos. El primero, la falta de transparencia detrás de DeepSeek. Es decir, el sesgo que puede haber tras los datos de la propia IA y cómo se presenta al público. Pero lo peor no es eso, sino las polémicas de falta de privacidad que han rodeado a la herramienta. Y es que, parece ser, que responde a los intereses particulares del gobierno chino, y también a su control.
Las razones detrás de la prohibición de DeepSeek en Microsoft
Microsoft ha tomado su propia decisión: ha bloqueado DeepSeek dentro de cualquiera de los ordenadores de sus oficinas. Muchos se preguntan el porqué de este golpe de timón, pero la verdadera razón, o al menos eso dicen desde Microsoft, no es más que por la política de seguridad de la propia compañía.
DeepSeek ha demostrado ser un todoterreno, y en occidente no ha sentado bien que la inmensa cantidad de millones invertida en IA se vaya al traste por una eficaz y barata IA de código abierto. Ello no es la causa de que las compañías lo prohíban, pero sí de que se le mire con lupa y recelen de esta opción.
Por parte de Microsoft, alegan que DeepSeek no ha pasado los «controles de auditoría internos», lo que quiere decir que puede ser una amenaza para los datos internos de la compañía propiedad de Bill Gates. Por lo que, de ahora en adelante, ningún trabajador de la compañía con sede central en Redmond va a poder utilizar DeepSeek. Pero hay que tener algo en cuenta, y es que esta medida no es exclusiva de Microsoft. Apple, Samsung o JPMorgan ya han hecho lo propio con la IA, aunque en su caso se tratase de ChatGPT o Gemini.
DeepSeek, por su parte, no teme a nada ni nadie. La IA china ha desarrollado un potencial enorme en un corto periodo de tiempo, y lo mejor de todo es que ha sido producto de una sola persona. De ahí el coste tan barato de producirla. Este veto no afecta a ningún de Windows particular, ya que vamos a poder seguir utilizando DeepSeek en nuestros ordenadores. Pero sí que nos puede hacer dudar sobre la inserción de nuestros datos confidenciales en chatbots de inteligencia artificial.