
La protección anti-copia, o DRM (Digital Rights Management), es un sistema mediante el cual se controla el uso ilícito de todo tipo de material digital implantado por las empresas creadoras de software (o por terceros) para decidir qué s finales pueden hacer uso de dicho material digital (los que lo hayan comprado) y quiénes no.
Actualmente, uno de los sistemas DRM que más está dando de qué hablar es Denuvo, sin embargo, la historia de los sistemas anti-copia remonta mucho más atrás, casi 50 años. A continuación, vamos a repasar la historia del DRM, concretamente en el sector de los videojuegos, desde sus inicios hasta Denuvo.
Sistemas DRM antiguos y arcaicos
Microsoft fue la primera víctima de piratería informática
Como hemos dicho, la piratería no es algo nuevo, sino que se remonta, inicialmente, a mediados de 1975, concretamente a la aparición del Altair 8800, el primer ordenador personal de gran éxito para pequeñas empresas. Microsoft desarrolló un sistema operativo (Altair Basic) para este ordenador en tarjetas perforadas (aún no existían ni los disquetes ni las cintas magnéticas). Alguien con al Altair y hábil con la máquina de troquelado creó 50 copias de este sistema operativo y empezó a distribuirlas libremente en el «Homebrew Computer Club«. De esta manera, mientras Altais hacía dinero con el hardware que vendía mientras que Microsoft no, debido a que su sistema operativo se podía conseguir fácilmente de forma gratuita.
Protegiendo directamente los disquetes
Tras ese caso se empezó a distribuir software a través de cintas de casete y disquetes, ambos medios muy fáciles de copiar libremente utilizando simples duplicadoras. Tras ver el problema, a principios de los años 80 llegó el primer sistema DRM On-Disk, «Key Disks», una serie de modificaciones físicas en las unidades que se implementaban durante la fabricación de los discos y que con un simple comando en el software, este sabría si su medio de origen es original (si coincide la marca de fábrica) o pirata.
Este sistema anti-piratería de pista fue utilizado por grandes equipos, como el Apple II o el IBM PC, así como en el software más importante, como el VisiCalc y Lotus 1-2-3. También empezó a llegar a los primeros juegos de PC, siendo el Microsoft Adverture el primer videojuego conocido con sistema DRM. Otros ordenadores, como el Commodore Amiga o la Atari ST también utilizaban estos sistemas anti-copia.
Cuando la capacidad de los discos duros aumentó y las grabadoras empezaron a ser asequibles se empezaron a utilizar, de nuevo sistemas de protección On-Disk, como tablas de contenido falsas y ficheros fantasma superiores al tamaño del disco. De esta manera, los CDs funcionaban sin problemas, pero, si se intentaban grabar, darían error.
El software avanza, y las grabadoras de CDs (quién no recuerda a Clone CD o a Alcohol) empezaron a ser capaces de detectar este tipo de engaños y a evitarlos, saltándose así estas protecciones.
Los CDs son inseguros. Confiemos en terceras empresas especializadas
Las desarrolladoras de videojuegos ya no dan más de sí y su principal finalidad es crear un juego, no un sistema anti-copia. Por ello, a mediados de los 90 empezaron a aparecer los primeros sistemas DRM de terceros:
- SafeDisc
- SecuROM
- StarForce
Estos sistemas de terceros intentaban impedir las copias mediante el uso de firmas digitales y hashes. SafeDisc es la más básica, no es molesta y, además, es fácil se saltar.
SecuROM, por el contrario, es uno de los más odiados. Este radical sistema DRM lo tenía todo, pesado, duro, infranqueable… era tan efectivo que hasta muchos discos originales eran detectados por él como discos piratas. Además, era incompatible con muchas lectoras de CD.
tienda de juegos GOG, por ejemplo, son todos ellos DRM-Free.
¿Qué nos deparará el futuro en cuanto al DRM?